Hemos hablado, hemos discutido, y se nos ha pasado el enfado. Todo vuelve a ser normal en nuestra especial relación. La señora Jones nos ha preparado uno de los platos que más me gusta, y siento que tengo hambre. Después de servirnos, se retira para dejarnos a solas, e iniciamos a conversación sobre nuestros trabajos, y parece ser que el de Christian ha sido todo un éxito, porque se muestra sumamente encantado con el proyecto que ha puesto en marcha. Se nota cuando algo le satisface, porque no para de hablar de ello, y a detallarme la técnica, algo de lo que no tengo ni la más mínima idea, pero me conmueve su entusiasmo, su alegría por el excelente resultado obtenido.
A pequeños sorbos bebemos del vino que más complace a Christian y poco a poco damos por terminada nuestra cena, que ha sido edificante después de las discusiones de las últimas horas. Nos volvemos a una, cuando un carraspeo rompe nuestra sobremesa. Es Taylor anunciándonos la llegada de la señora Robinson.
¿ Qué quiere ahora ? - le pegunto a Christian
- No tengo ni idea- me responde él
-¿ Hablaste con ella?
- Si lo hice, y la expliqué que no quieres ir a comer con ella, y aunque no lo entendía, tuve que explicarla que es debido a la relación que tuvimos en tiempos y que no terminas de entender.
- Sí que la entiendo. Eres tú el que no quieres ver la realidad.
Y nuevamente una interrupción de Taylor "La señora está subiendo"
Hago intención de irme, pero Christian me retiene al tiempo que la puerta del ascensor se abre, dando paso a Elena, que por unos instantes se detiene antes de entrar en el salón. Noto perplejidad en su rostro, como si el verme allí fuera lo más extraño del mundo. ¿ A qué habrá venido? ¿ Sentirá celos y quiere volver a pisar el terreno firme que pisó hace tiempo? La mano de Christian sobre mi brazo, está tensa, apretada contra mi carne, hasta casi producirme dolor. Me mira de reojo, pero yo mantengo mi vista fija en la mujer que le sedujo y le iniciara en esa relación absorbente y dominante a la que le sometió durante años.
- Es lunes ¿ verdad ? - dice dirigiéndose a Christian e ignorándome por completo
- Si lo es - la responde él
- Pensé que estarías solo
Y en el acto deduzco a qué se debe su asombro: ella creía que nuestro encuentro terminaba el domingo por la noche, y que ni por asombro imagina que vivimos juntos. En mi interior me regocijo al pensar que quizá esté perdiendo la influencia obre él, que por otra parte es más que evidente, sólo que quizá ella no quiere verlo. Me asombra la voz de él, cuando prosigue hablando
- Ana está conmigo ¿ A qué has venido Elena?
- Me mira perpleja, dirigiendo la mirada de uno a otra. Y nuevamente hago intención de irme y dejarles solos. Está visto que ella lo prefiere así y yo no deseo estar en el mismo espacio que ella. Christian intuye lo que deseo hacer, y me sigue reteniendo.
- Elena, no tengo secretos para ella. Conoce todo mi pasado y además estamos juntos. Te repito ¿ a qué has venido Elena ?
- Bien... Me alegro por vosotros
Manipula dentro de su bolso y saca una nota doblada al tiempo que se dirige a Christian diciendo que la están haciendo chantaje. Se me pone la piel de gallina pensando que alguien haya descubierto su modo de vida. No me importa el de ella, pero no quiero bajo ningún concepto que eso alcance a Christian, y precisamente es lo que me alarma. Le tiende la nota, pero él la indica que la deje sobre la encimera y que la abra. La pregunta si ha ido a la policía, y ella lo niega.
Después de que Christian haya leído el chantaje, se echa a reír, y mirándola la dice que eso es una bobada
- Alguien que chantajea no pide esa cantidad ridícula. Debe tratarse de una broma. ¿ Sospechas quién puede ser ? - Ella niega con la cabeza y yo ya he escuchado lo suficiente. Alego que estoy cansada y decido retirarme. No quiero saber nada de los asuntos de esa mujer. Cuando voy en dirección al dormitorio, decido escuchar de lo que hablan. Sigue la conversación referente al chantaje y Christian la ofrece que Welch averigüe algo, y ella acepta.
- Se os ve bien - le dice
- Soy muy feliz- la responde
-¿ Por qué no quiere nada conmigo? Insiste ella
-Elena, no entiende lo que tuvimos, así que por favor déjala , déjanos en paz. Ahora soy feliz; tengo lo que antes nunca tuve, así que no interfieras en nuestros asuntos. De verdad te digo, déjala en paz.
- Está bien. Es que me preocupo por ti
-Ya lo sé, te lo agradezco, pero ahora es ella mi mundo, así que no interfieras. Y por favor la próxima vez que quieras hablar conmigo, comunícamelo antes
- Está bien, así lo haré. Sabes que tu amistad es muy importante para mi. De ahora en adelante así lo haré.
Se están despidiendo y yo, sigilosamente me apresuro a ir al dormitorio. Me pongo la camiseta y me meto en la cama rápidamente antes de que Christian pille que les he estado espiando.
Auditoría: Relato libre de 1996rosafermu, basado en la trilogía de EL James, Cincuenta sombras de grey
Editada: Año 2017
Ilustraciones: Cincuenta sombras más oscuras
DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS
No hay comentarios:
Publicar un comentario